La agencia literaria cuando apuesta por un manuscrito, está apostando por la visibilidad de la obra en sí misma y de su autor. En la actualidad esa visibilidad es mayoritariamente a través del mundo multimedia, las redes sociales y los métodos tradicionales como presentaciones o eventos presenciales.
Los autores consagrados son una apuesta segura tanto para las editoriales como para las agencias literarias, pero el verdadero trabajo se esconde detrás de los autores no conocidos que envían sus manuscritos porque se enfrentan al handicap de luchas contra una imagen y un nombre conocido. Por eso no podemos ponernos a su altura desde un primer momento, debemos ser como las hormiguitas y empezar mostrando la imagen del autor y de su obra en aquellos ámbitos que le pueden recordar y reconocer con facilidad, para poco a poco ir escalando puestos y así tener la posibilidad de llegar a ser un autor consagrado.
Hay que tener la mente abierta y pensar que si una agencia literaria se fija en nosotros, una editorial también puede hacerlo y también los lectores que son los que realmente pueden lanzar nuestra carrera. Por eso la agencia literaria apuesta por llegar a los lectores, por difundir nuestra obra, que nos lean y nos recomienden. No todo el mundo puede llegar a tener fans, pero sí lectores y si además se acaban convirtiendo en fans, mejor que mejor. Vivimos en un mundo competitivo en el que cada vez hay más músicos, más profesionales de ciertos ámbitos académicos y más escritores. Si queremos destacar tenemos que trabajar duro en la imagen de nuestra obra y la nuestra propia, para conseguir un hueco y abrirnos camino.
En una agencia literaria te asesoramos y orientamos para que potencies esa imagen, darle salida a tu obra y abrirte un camino en este mundo. Ponemos toda la ilusión en tu obra al igual que tú, creemos en tu talento y que lo puedes lograr, por eso queremos ayudarte y estar a tu lado. Tienes nuestro compromiso para que el proyecto en común se realice con la mayor posibilidad de éxito y aunque no lo garantizamos, lo intentamos como si tu obra fuera nuestra.